Veinte niños, agrupados en parejas, se someten a un experimento sin saberlo. A la espera de una supuesta sesión fotográfica, los chavales se quedan solos frente a unos platos que esconden su merienda. Al levantar los cubreplatos se encuentran con una sorpresa inesperada: uno de los platos presenta un suculento sandwich de Nocilla, mientras que el otro está vacío. Todos los niños compartieron su comida. Realmente emotivo, ¿no? Y si el instinto de compartir forma parte de nuestra naturaleza ¿por qué vivimos en un mundo con capacidad para alimentar al doble de su población, pero donde 3,5 millones de niños mueren de hambre cada año? Y es que, aunque hoy existen los medios para prevenir, diagnosticar y tratar la desnutrición, sólo el 3% de los niños afectados logra acceder al tratamiento.
Realizada por la agencia Shackleton para Acción contra el Hambre, esta campaña pretende recaudar fondos y concienciar a la población sobre el hambre en el mundo en el contexto del Día Mundial de la Alimentación. Esta iniciativa se ha dado a conocer a través de la web www.experimentocomparte.org, un viral, banners, e-mailings y acciones 2.0 que invitan a participar y realizar donaciones.
Fuente: Grupo Control
jueves, 20 de octubre de 2011
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